«FUnGµ§» CAMINO DE PIEDRAS

ESA NOCHE

Y corria más y más rápido aquella noche,
sin entender la causa de las desgracias.
Un sentimiento de dolor se apoderó del alma,
que los sonidos no atinaban a la existencia
y en la mente esa imagen mojada se temblaba.

Sus ojos parecían enfrentar el miedo inoportuno esa noche,
y su brillo ya hacía presagiar el inicio de las desesperanzas.
La fuerza del viento procuraban desvanecer las lágrimas,
que en cada cerrar de ojos brotaban como manantiales de otoño.

La piel se cubrió de lóbrego frio esa cálida noche,
el cabello se mecía como goce ajeno a las ansias.
El corazón yacía en el suelo como decrépito y mustio,
y las manos tomando el amor en un puño.

Y seguía corriendo, tratando de olvidar el momento,
rezando y esperando que sea un maldito sueño.
Y seguía corriendo, como esquivando el dolor,
sin poder parar para salvar al amor.

danielf